¿Qué querrá la vida de mí que me hace estar aquí?
Es un hecho que todos los días nos enfrentamos a situaciones que no salen como lo esperamos, unos lo llaman problemas, en coaching los llamamos quiebres y otros lo llaman simplemente situación.
La forma en que veamos estas situaciones o quiebres (en lo personal no me gusta utilizar la palabra problema) será la manera en cómo reaccionemos y le demos solución.
Puede ser desde la situación más pequeña, hasta una más grande como enfrentar un divorcio, la muerte de un ser querido, perder el trabajo, depende cómo veamos las cosas estaremos en posición de ser víctimas o tomar acción para que las situaciones vuelvan a su cauce normal
Recuerdas cuando estabas en la escuela, ¿cuál era mejor manera de comprobar que aprendiste una lección? Cuando el maestro te aplicaba un exámen o una prueba para corroborar tus conocimientos y comprobar que la lección quedó aprendida.
Eso es exactamente lo que pasa en nuestra vida cuando se presentan situaciones que se salen de nuestra rutina diaria.
Recuerda algún evento en el pasado que en su momento lo viste como el fin del mundo y que en ese momento sentías que no había un camino o una salida a esa situación, y sin embargo la superaste y en retrospectiva agradeces el haber pasado por eso porque gracias a ese “problema” hoy eres una persona más fuerte, más sabia, más consciente, más humana, ¿verdad que no me equivoco?
Todas las situaciones que nos pasan son pruebas que nos pone la vida (o de aquel Ser Divino en el que tu creas), pero para que esas pruebas? Para corroborar que la lección que necesitabas aprender realmente se quedó grabada
Nuevamente regresamos a nuestras épocas de escuela, ¿qué pasaba cuando tronabas un examen? Generalmente tenías otra oportunidad para que volvieras a estudiar y pasar el examen, esto con la finalidad de que te gradúes. Sin embargo, si volvías a tronar te mandaban a un examen extraordinario, algo así como tu última oportunidad antes de que la escuela te “dejara” ir, es decir, reprobaras el año
Nuevamente regresa al tiempo presente, cuando la vida te manda una pequeña prueba y tu no la pasas satisfactoriamente, se te dará otra oportunidad para que estudies y vuelvas a presentar, y si aun así con esta segunda oportunidad no logras pasar la prueba, te mandan a un exámen extraordinario, con la finalidad de que seas mejor persona y aprendas la lección.
¿Qué lección es la que tienes que aprender? Una de mis preguntas favoritas que me hago cuando estoy en medio de una situación no muy grata es;
¿QUÉ QUIERO APRENDER DE ESTO?
Cuando no logro encontrar la respuesta, me la vuelvo a preguntar de una forma, digamos más contundente: ¿Qué ch….. tengo que aprender de esto?.
Este punto es sumamente importante porque si tomamos esa situación como algo sin importancia, como algo que pasó al azar y no aprendes, te volverán a mandar a otra prueba pero con un mayor grado de dificultad, con la finalidad de que te gradúes en esta vida, es decir seas una mejor persona
Para que nos quede más claro esto que te estoy diciendo, te voy a poner un ejemplo:
Un día amaneces con un pequeño dolor de garganta, sabes que te debes de cuidar pero tus actividades diarias no te permiten hacerlo, estás en medio de un gran proyecto con un fecha límite para entregarlo, en casa tienes varias obligaciones que no puedes delegar porque crees que solamente las puedes hacer tu, tu vocecita interior te dice que necesitas tomarte un pequeño descanso, pero no la escuchas y sigues con este excesivo ritmo de trabajo.
Volviendo al dolorcito de garganta, te tomas las pastillas que en alguna ocasión el médico le recetó a ese familiar tuyo que siempre tiene un remedio para todo, al cabo de un par de días te sientes mejor y continúas con ese ritmo de trabajo (1er Exámen)
De repente el día que sabes que es el más ocupado, amaneces con un poco de temperatura, nuevamente esa vocecita te dice quédate a descansar, tu cuerpo necesita recuperarse, otra vez no escuchas porque tienes muchas cosas que hacer estos días, (y por supuesto solo tú puedes hacerlas), ya habrá oportunidad de descansar. Por sentirte mal físicamente, se te olvidan las cosas en el trabajo, mandas una información a la persona incorrecta, nuevamente te tomas una medicina y sigues trabajando (2º Examen)
Un día manejando de vuelta a tu casa ya muy noche después de haber terminado finalmente el proyecto, te sientes con la vista tan cansada que no te fijas de la señal de alto y te estampas con otro coche, afortunadamente solo recibes unos pequeños golpes pero para que sanen tienes que estar inmovilizada en la cama, de lo contrario puedes tener problemas serios posteriormente (Exámen extraordinario)
Este es un ejemplo de lo que podría pasar si en el primer examen no nos tomamos el tiempo de preguntarnos: ¿Qué me está diciendo está situación que estoy pasando, o que tengo que aprender de esto?
La vida te dará una segunda, una tercera o hasta una cuarta oportunidad, nada más que aguas porque así como en la escuelas esas segundas o terceras oportunidades eran más difíciles, así serán las pruebas que nos pongan la vida con la finalidad de que prestemos atención y aprendamos en la PRIMERA oportunidad.
Cada situación es una forma de aprendizaje, si analizas las pruebas más difíciles y los retos que has tenido que superar en el pasado, te darás cuenta que gracias a ellos, hoy eres la persona que eres, que fueron necesarios esos momentos para que te dieras cuenta de lo que puedes lograr, de lo que eres capaz de hacer, de qué estas hecho o hecha y de que tengas la plena consciencia que tienes toda la capacidad para ser un extraordinario ser humano.
¿Verdad que las situaciones o problemas como tu les llamas no son tan malos? NO quiero darte una lección de positivismo, simplemente quiero que recuerdes que cada día tiene su razón de ser, cada situación que tienes que enfrente se te ha enviado especialmente para ti, para poner a prueba la grandeza que tienes y para convertirte día a día en una mejor persona.
Por último, te comparto esta pregunta que en alguna ocasión escuché en una certificación y que a partir de ese momento me ha ayudado a entender y ser consciente de que nada pasa por azar y que todo sucede por una razón: el convertirme en un gran ser humano
¿QUÉ QUERRÁ LA VIDA DE MI QUE ME HACE ESTAR AQUI?
Por eso…
¡DDC y aprende desde el primer examen!