Cómo crecen las mujeres. Rompe los 12 hábitos que te detienen para conseguir tu próximo ascenso, promoción o trabajo.
Hábito 1: Renuencia a promover nuestros logros
Cuando descubro un libro que me impacta favorablemente en mi forma de pensar y actuar lo comparto resumido en este blog para inspirarte a que tú también modifiques aquellas creencias que no te permiten avanzar.
El libro “Cómo crecen las mujeres, rompe los 12 hábitos que te detienen para conseguir tu próximo ascenso, promoción o trabajo” de Sally Helgesen y Marshall Goldsmith, tiene tantas enseñanzas que no se pueden sintetizar en algunos párrafos. Y es por eso que te estaré compartiendo cada semana un breve resumen de cada capítulo para que así como yo, descubras todo lo que puedes lograr en tu carrera profesional haciendo cambios en tu forma de pensar y actuar.
Las mujeres somos renuentes a promover nuestros logros
La gran mayoría de las profesionistas se distinguen por estas características principalmente: Dar más de lo que se espera de ellas, son muy comprometidas con las tareas que se les asignan, son meticulosas y puedes contar con que cumplirán con lo que se les pida.
Así como la mayoría de nosotras somos sumamente comprometidas con nuestro trabajo, en la misma medida o más, somos renuentes a reconocer o hacer que los demás reconozcan nuestros logros. Es muy común pensar que el hecho de decir “hey mira el buen trabajo que estoy haciendo”, puede parecer presunción o soberbia y a nadie le gusta que la cataloguen con estas actitudes.
Personalmente solía pensar que mi trabajo debe hablar por mi y al leer este primer capítulo entendí el gran error que cometí durante muchos años. Existen dos formas de actuar acerca de promover nuestro trabajo para que los demás noten, la primera es: pensamos que la gente presuntuosa que solamente habla de sí misma no son bien recibidos y por eso nos negamos rotundamente a ser como ellos. Y la segunda forma de pensar es sí ser presuntuosa. Cuando creemos que no existe el término medio que nos permita reconocer nuestros logros de una forma natural sin llegar a la soberbia o presunción, es decir, pensar en términos de blanco o negro puede ser perjudicial para nuestro crecimiento.
Al no ser presuntuosas nos sentimos moralmente superiores a los demás lo que nos llena de orgullo pero estancadas en el mismo lugar. En lugar de preguntarnos por qué tenemos problemas en reconocer nuestros logros, nos auto felicitamos por tener la “conciencia limpia” y no cometer el error de ser una mujer presumida.
Otra razón por la que nos sentimos incómodas de realzar nuestros logros, es porque hemos sido educadas para ser modestas y que llamar la atención no es bien visto. ¿Cuántas oportunidades hemos dejado pasar por ser modestas y no decir “Sí esto lo hice yo?. ¿Vas a seguir permitiendo que los demás sigan avanzando aún cuando no tienen el mismo nivel de conocimientos, experiencia y compromiso que tú tienes?.
Sé que es sumamente complicado empezar a hablar sobre nuestros logros y el buen trabajo que estamos haciendo, lo sé porque aún tengo dificultades para hacerlo. Si estás pasando por el mismo problema que yo, estos son algunos de los consejos para empezar a promover tus logros:
Hablar sobre lo que contribuyes y detallar lo calificada que estás en la corporación donde trabajas, no te hace ser soberbia. Estás mandando una señal de que estás lista para crecer al siguiente nivel jerárquico.
Cuando las mujeres buscamos trabajo o pedimos una promoción somos menos asertivas que los hombres cuando se trata de dar a conocer nuestras credenciales. Cuando un hombre está buscando una oportunidad laboral suele describirse de esta forma: “Tengo exactamente las habilidades que están buscando y puedo cumplir con los requisitos por que soy excelente en X, Y, Z”. Probablemente Z no tenga nada que ver con el trabajo pero esta confianza ayuda a convencer de que es el candidato perfecto. Mientras que una mujer muy probablemente diría: “Nunca he tenido un trabajo como este antes y no estoy segura si mis conocimientos sean suficientes para obtener este trabajo”.
Cuando estás completamente segura de las habilidades, conocimientos y experiencia que ofreces, puedes transmitir esta seguridad para que estén dispuestos a darte una oportunidad.
Promoverte a ti misma, lejos de ser vergonzoso es una parte muy importante de tu trabajo si tu deseo es seguir creciendo. Si realmente quieres alcanzar tu máximo potencial, tienes que hacer que tus logros sean visibles, sobre todo con las personas correctas.
Si no encuentras la forma de hablar acerca de lo que vales y lo que aportas a la compañía estás enviando un mensaje que no le pones empeño a tu trabajo y que no estás interesada en crecer. Si tu no te valoras, ¿Por qué alguien más tendría que hacerlo?.
Si aún con estas ideas sigues dudando de promoverte a ti misma, piensa en ti como un producto tangible. Cuando hablas de tus logros te estás vendiendo, estás hablando de tus cualidades, de las necesidades que pueden satisfacer si compran lo que tu vendes. La gente va a comprar lo que tu vendes porque confían en ti y porque les aportas valor. Creer en tí es el principal ingrediente para convencer a los demás de que eres la mejor opción para ese siguiente nivel que estás buscando.
Otra idea para ayudarte a promoverte es pensar en reflexionar sobre este ejemplo: Cuando Apple está haciendo una campaña de publicidad para Iphone, ellos no dicen “Bueno, algunas personas van a preferir Samsung” o “Es posible que si pruebas Iphone te pueda gustar”. ¡NO!. Su trabajo es convencernos lo maravilloso que es el Iphone y decirnos “Yo tengo un excelente producto”.
Si esta clase de declaraciones te hacen sentir incómoda, otra alternativa para animarte a promover tus logros es pensar en términos de Porqué es importante para ti dar ese siguiente paso en tu carrera. Si solamente el hecho de crecer jerárquicamente no es lo suficientemente motivador para ti, entonces analiza qué hay detrás de ese deseo de crecer.
Tal vez significa que estando en una mejor posición puedes hacer cambios que contribuyan a que tus clientes tengan un mejor servicio, tal vez quieras inspirar a tus hijos o darles una mejor calidad de vida a tu familia. Cuando tienes una absoluta claridad de la razón por la que quieres crecer, tendrás el valor para hacer lo que se requiere para promover tus logros.
¿Cuál es el primer paso que necesitas dar para hacer un lado el miedo o la modestia y hacer notar todo el valor que hoy aportas?
¡DDC y da a conocer todo lo que aportas y vales!